El
periplo de reconversión, de regeneración, que tiene y está
experimentando Países Bajos puede llegar a ser un síntoma de
crítica fácil y desidia en el espectador externo. Lo cierto es que
la función de L. van Gaal, una vez más, se sustenta en el
desarrollo de jóvenes jugadores y en la creación de un combinado.
Ciertamente, en esta ocasión la empresa se define más complicada
por ser la característica fundamental perteneciente a una selección,
no a un club. Sin embargo, la clasificación como primera de grupo
para el Mundial de Brasil es un buen indicativo de lo que se está
germinando. Si bien, obviamente, la mirada no se puede emplear con
grandes visos de grandeza. Por el momento.
Tres
son los partidos que ha disputado Países Bajos en su preparación
para la cita mundialista. El patrón se ha mantenido en todos ellos
si bien se han presenciado variaciones interesantes fruto de la
diversidad que posee el combinado. Ello hace referencia a la
implantación de tres centrales fijos como esquema primario y a la
inclusión de un activo más en zona central contra rivales, a
priori, inferiores. Es la zona que cuenta con más jugadores novatos
en grandes eventos, tanto a nivel de equipos como a nivel de
selecciones. No obstante, la configuración es meridiana: Blind
lateral izquierdo, Martins Indi, Vlaar y S. de Vrij centrales;
Janmaat lateral derecho.
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Salida de balón de Martins Indi |
La
indefinición de Blind causa que pueda actuar en el lateral izquierdo
y en el centro del campo. De hecho, L. van Gaal ha colocado al
mencionado en ambas ubicaciones, siendo Kongolo v Ecuador el lateral
izquierdo manteniendo la defensa de tres centrales y Martins Indi v
Wales pasando a jugar Países Bajos con dos centrales. Se espera que
ante España y Chile se utilice la opción primaria de tres centrales
con Blind lateral izquierdo y, quizás, ante Australia formar con un
efectivo menos en defensa por el nivel y las características del
rival. Martins Indi, de manera determinada, es el encargado de
realizar la salida de balón desde primera línea de creación. Tan
exponenciado ello que, cuando el rival lo permite, se ubica en campo
contrario con posesión de balón propia. Capital, por tanto, como
apoyo a la circulación de balón.
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Espaciado para Janmaat |
Donde
no existe ninguna duda es en el lateral derecho. Janmaat ha jugado de
manera regular y continua. Tanto que Verhaegh, teórico sustituto,
solo ha disfrutado de 44 minutos de 180 disputados. Ello se
evidencia, a su vez, en el juego desplegado en fase ofensiva. Es en
el sector derecho donde más se ofrece el apoyo del carrilero. Por el
esquema elegido, el jugador que juegue en esta demarcación debe ser
una pieza importante en faceta ofensiva. Tanto llegando desde segunda
línea como actuando de inicio en campo contrario, cual extremo. La
combinación con los jugadores que ocupan posiciones de ¾ de campo
son evidentes y necesarias. Se cuenta con Janmaat para un aporte en
banda fundamental. Esto es: amplitud del terreno de juego y desahogo
de la circulación perenne por zonas centrales.
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Sneijder MC |
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Cuatro en el medio |
Uno
de los principales déficits de Países Bajos se encuentra en su
circulación de balón. En lo referente al ritmo y a la profundidad
con la cual la llevan a cabo. El hecho de contar con dos jugadores
muy abiertos (carrileros) y tres activos ofensivos implica que resten
dos jugadores en zona central. El único componente fijo es N. de
Jong, no siendo un especialista con el balón jugado para superar
líneas de presión mediante pases y, ni mucho menos, mediante
desequilibrios individuales. A su lado se ha probado a L. Fer,
Wijnaldum y J. de Guzmán. Ninguno ha destacado, siendo lo
vislumbrado más destacado la presión elevadísima del último
referido. Este problema es bastante grave para los intereses de L.
van Gaal porque supone que no se conecta con los jugadores ofensivos
de una manera continua y fluida, porque no se impone un ritmo
adecuado al partido, siendo siempre de perfil bajo y previsible, y
porque obliga a Sneijder, el mediapunta, a ubicarse en posiciones muy
atrasadas.
Es
ya habitual ver cómo el mediapunta de un equipo se posiciona en zona
central para entrar en contacto con el balón. Ello es fruto y evento
común en equipos que poseen problemas en el tránsito del balón.
Obviamente, se resta una figura a lo ofensivo y, en este caso, no se
aporta una pieza decisiva para tal efecto. Porque Sneijder no es
diferencial actualmente en ese territorio y porque los apoyos siguen
situándose en áreas muy lejanas. Cuando se ha jugado con dos
centrales Blind ha permutado su presencia en banda izquierda, cuasi
extremo, y en el sector izquierdo del centro del campo. En esta
ocasión se contaba con cuatro efectivos al bajar metros Sneijder. Ni
siquiera con una superioridad numérica se ha evidenciado o exhibido
mejoría.
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Presión MC |
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Defensa de jugadores ofensivos |
Lejos
de considerarse como subsanable esta escena, los que más sufren tal
contratiempo son Robben y R. van Persie. Ambos actúan en posiciones
centradas con libertad para caer a bandas. El primero, que ya ha
jugado en el tramo final con B. München como referencia del ataque,
debe mejorar su ratio goleador y su efectividad goleadora. El
segundo, más participativo en caídas a banda, sobre todo la
izquierda, no ha experimentado un grado elevado de ocasiones de gol
generadas por su equipo. Esta pareja es conocedora de las permutas y
actitudes a realizarse en posiciones centrales. Pero, hace un escaso
lustro, ambos partían siempre desde banda con un perfil de extremo a
pierna cambiada. Y tal evidencia casa con las variantes que tiene L.
van Gaal para sustituirles. A saber: Lens y Memphis Depay.
La
elección por un perfil de atacante más dinámico y acostumbrado a
jugar como extremo como referencia, como delantero, es meridiana por
parte del seleccionador. Hasta tal punto llega lo expuesto que K. J.
Huntelaar no ha contado con más de 30 minutos de juego de 180
disputados. Es el único jugador con un perfil puro de delantero. Es
el único jugador con condición de “9” de área y finalizador de
jugadas. Y no cuenta. Quizás, consciente de los problemas para
generar juego, L. van Gaal coloca a jugadores más capacitados para
fabricarse las ocasiones de gol de manera individual. Con más
desborde y velocidad. Lo cierto es que KJH es el factor diferente en
la nómina de delanteros que acuden a Brasil. De discutir la
titularidad a RVP en el pasado Mundial pasa a ser la última opción.
Mientras, Países Bajos solo ha materializado cuatro goles en los
últimos tres partidos. En las tres citas de preparación.