Variantes pero misma idea

La temporada pasada fue, sin ninguna duda, la revelación en Alemania. El Borussia Monchengladbach, sin citación previa ni atisbo alguno, acabó la Bundesliga en cuarta posición, dando lugar ello a disputar la fase de clasificación de la UEFA Champions League. Por tanto, lo esperado para la siguiente era elevado y, ahora sí, centralizado mediante unos focos de atención que persuadían a cualquier empresa como presencia inesperada. Todo lo contrario. Sin embargo, y con pequeños cambios presentes, la situación actual no es tan idílica como la vivida hace escasos meses. Tras cuajar una temporada tan positiva hasta tres piezas importantes del equipo aprovecharon para mejorar su status: Dante (B. München), Reus (B. Dortmund) y Neustädter (Schalke). Sus recambios fueron A. Domínguez (Atlético de Madrid), G. Xhaka (Basel) y L. de Jong (Twente).

Herrmann MP

El esquema es propio al 4.2.3.1 o 4.4.2. Depende, en gran medida, de los jugadores que se utilicen en ataque. La temporada pasada Reus era el encargado de ocupar la mediapunta, posición donde rindió a unos niveles muy altos, y en la presente es Herrmann quien, abandonando la banda, realiza las mismas funciones. Ahora bien, en ocasiones se ha optado por formar una dupla de ataque con L. de Jong y Hanke, existiendo la variante de I. de Camargo. Pocas veces se ha visto al alemán permutar por bandas, siendo este territorio propiedad de J. Arango en el perfil izquierdo y de Cigerci / Rupp en el perfil derecho. Sea como fuere, la idea de presión en primeras líneas no se modifica según los nombres que sean de la partida. Y esa agresividad para recuperar el balón es un punto destacado. Por lo que supone y por cómo se realiza.

Presión salida balón

Presión arriba

Fue curioso ver cómo, ante el equipo más exigente de la competición, se realizó una presión muy adelantada con muchos efectivos. La consigna era clara: la circulación de balón por parte del B. München no podía ser fluida. Mucho menos clara. Así, cinco hombres se presentaban en campo contrario para realizar marcas individuales y zonales con el fin de que no se produjeran recepciones con balón raso y, al optar por balones aéreos, la recuperación fuera más asequible. Los dos extremos y los dos delanteros (incluyendo al mediapunta) avanzaban metros para taponar la salida de balón de los centrales rivales, aptos para producir tal tarea. Esto, sin embargo, no es productivo en cifras goleadoras. Tanto a favor como en contra. En 17 jornadas disputadas se promedian 1.47 goles por partido anotados y 1.52 goles encajados. Números muy bajos para un apartado y muy elevados para otro.

Presencia en zona central

A la hora de bascular, de recuperar metros al realizar una presión tan elevada con tantos efectivos, la estructura no se ve resquebrajada en exceso ya que los dos mediocentros siempre suelen estar presentes y los extremos conocen su función defensiva que, constantemente, les provoca estar en campo propio. La recuperación de los hombres atacantes a posiciones más retrasadas es necesaria para generar situaciones de superioridad en zona central. Cuando esto no se produce el rival ya cuenta con una ventaja estadística y con lo primordial en el juego: espacio y tiempo para pensar y reaccionar/actuar. Ahora bien, el hecho de movilizar a tantos jugadores en líneas altas de presión genera en el rival que varios jugadores del centro del campo tengan que retrasar su posición para entrar en juego con el balón y ofrecer variantes a la salida de balón. Esto, a su vez, desatiende efectivos en zonas opuestas o, directamente, provoca que el equipo entero bascule hacia portería propia. Ahí, en esos momentos, el B. M'Gladbach provoca graves problemas al rival.

Salida con centrales abiertos

En la faceta opuesta, cuando se trata de realizar la salida de balón, el conjunto de L. Favre se caracteriza por querer comenzar la jugada desde primera línea. Su fase de creación de juego comienza con los defensas, abriéndose hasta las bandas si es necesario para que las recepciones se produzcan con el menor número posible de rivales. Así, uno de los mediocentros se encarga de retrasar su posición para generar superioridad en esa zona delicada y optimizar los recursos combinativos que trata de implantar el conjunto alemán. Esta temporada, con la contratación de G. Xhaka, se añadía más potencial en este recurso pero la participación del suizo se ha visto reducida de manera considerable y, tras ser probado como mediapunta, actualmente son Marx y Nordtveit los centrocampistas titulares.

Llegada de lateral derecho

Una de las principales consecuencias del anterior apartado mencionado es que, al estar los centrales muy abiertos para recibir el balón, los laterales ocupan posiciones más avanzadas y se convierten en una opción más de ataque. La proyección de Jantschke no es ninguna novedad porque ya se contempló en la temporada pasada y, como se vislumbra en la imagen, su aparición se produce en campo rival sin oposición. Varias veces genera superioridad ofensiva respecto a la defensa del lateral rival y el desplazamiento en largo no se define como recurso inapropiado porque es la manera más eficaz de trasladar el balón a la zona donde se ha producido el desajuste rival. En estas ocasiones, cuando el lateral (bien sea el de perfil diestro o zurdo), la cobertura del mediocentro inmediatamente más próximo al radio de acción se torna como fundamental.

Defensa muy cerrada y poblada

Sin embargo el B. M'Gladbach también sabe defender con muchos miembros en campo propio. Cuando la situación lo requiere es capaz de acumular un gran número de efectivos cerca de su área, si bien la coordinación en transición no siempre es la idónea. Esto es una variante porque la idea inicial del equipo no es comenzar los partidos tan retrasados y con tantos hombres en defensa, lo cual denota la versatilidad que se posee sacándola a escena dependiendo del rival y sus características. Jugando at B. München, con marcador a favor y siendo dominados, la totalidad de los jugadores estaban en campo propio y hasta siete se encontraban en posiciones centrales al borde del área.

Defensa mixta córner

Defensa mixta falta lateral

En lo referente a faltas laterales y córners la estrategia más utilizada es la propia al marcaje mixto. Esto es: ciertos jugadores se preocupan de realizar un emparejamiento directo con jugadores rivales y otros se ubican en zonas sin presencia rival para marcar esa parcela de manera zonal. Siempre se ha estipulado que en las defensas zonales los fallos suelen ser más numerosos por la inexistencia  de una marca fija. Y en las individuales es más fácil constatar quién ha sido el principal generador de espacios. Ahora bien, la combinación de ambas la realiza el B. M'Gladbach al no dejar a ningún jugador en ataque para aprovechar posibles despejes y al existir jugadores sin oponente fijo por inferioridad numérica del rival.

Situados en la octava plaza, a sólo un punto de posiciones europeas y a cinco del cuarto puesto, la irregularidad mostrada en la primera parte de la temporada se traduce en 6 victorias, 7 empates y 4 derrotas. Cuentan sus últimas 5 citas sin ninguna derrota y con 9/15 puntos. Su rival en los Dieciseisavos de Final de la UEFA Europa League es la Lazio. Su rendimiento en la segunda parte de la temporada atisba a positivo. Si se une a la constancia la entidad del oeste de Alemania puede volver a terminar la Bundesliga en puestos altos de la clasificación. Por segundo año consecutivo.