Sincero: 1. dícese de un ser humano que actúa con sinceridad. 2. adjetivo que califica una actitud pura.
Manolo Preciado se ha desmarcado con unas declaraciones controvertidas, polémicas y para algunos incitadoras a la violencia. Mas, a pesar de todo ello, tienen un sustento y una argumentación que muchos quisieran poseer para con sus opiniones. Llama la atención que cierto sector de la prensa deportiva clame sensatez y paz con el fin de no encontrar un ambiente hostil en campo ajeno… quizás deban recurrir a la memoria para establecer como condenables ciertas declaraciones de un ser que se autodenomina como único.
Analizando punto por punto las frases de “Manolín” no se puede afirmar que sean blasfemias ni tengan el fin de calentar un partido que ya de por sí lo es. Tal ha sido la repercusión e importancia de la rueda de prensa que compañeros de profesión han comenzando a arropar estas opiniones (véase M. Pochetino). Y como dato principal se promueve que el que sí estará sentado en el banquillo el próximo domingo será Preciado, no el aludido.
Muchos esperaban que alguien diera de su propia medicina al provocador que colecciona títulos. La figura se ha personificado en un entrador de un equipo humilde, de zona media-baja de la tabla y carismático. Por ello muchos se atreven a atacarle, por ello la mayoría lo respalda. Pero lo que realmente importante y deprimente es la sensación que reina en el trasfondo de la cuestión: todas las provocaciones de Mourinho se perdonan porque “es así, es un estratega”.
En el fútbol no todo vale, ni siquiera aunque el señor Inda se empeñe en querer mandar más que los responsables de la oratoria de ciertas entidades futbolísticas. Siguiendo esta tónica no cabe la menor duda de que la imagen del club más importante del siglo XX se está modificando. El bucle parece no tener fin.
No hay comentarios:
Publicar un comentario