Denominado como “Match of the Day”, sin ninguna duda el ManU v Chelsea era el partido de la jornada en la Premier League. Por muchos y diversos aspectos pero, probablemente, el más significativo se basaba en saber cómo iba a competir el conjunto de André Villas-Boas ante un rival de enormes recursos y nivel extremo en este inicio liguero. Varios son los aspectos resaltables:
- Posición espacial
La situación en el centro del campo, así como los encargados de ocupar dicha zona, se está convirtiendo en el objeto principal de análisis. Y es razonable a tenor de lo vislumbrado hasta el momento. No ha lugar a duda de que los tres jugadores que actúan en la zona media son, quizás, los que más peso específico posean en el equipo debido al planteamiento que el portugués realiza en su ideología particular. Esta vez insistió con Ramires y Lampard como acompañantes de Meireles, el cual actuó como pivote. El primero no aporta nada destacable y sus cualidades (que alguna destacable posee) no se asemejan a las de un interior puro (véase Moutinho en su etapa en Oporto). Pero lo más preocupante es el estado de forma y el consiguiente rendimiento en el terreno de juego de Frank Lampard. No está y no se sabe si se le espera. Resulta bastante conmovedor afirmar que lo único que conserva su juego, y que puede desestabilizar a las defensas rivales, es esa capacidad innata de llegada desde segunda línea. Mas, obviamente, ello es escaso para lo que se está implantando en el club de Londres.
- Variantes
Basándonos en que las cualidades propias de toque y combinación son las adecuadas y exigibles a los centrocampistas de André Villas-Boas la presencia de O. Romeu y Josh McEachran subsanaría varios problemas y aportaría al colectivo fluidez y ritmo. Y es que, a pesar de sus edades, en esas condiciones futbolísticas son infinitamente superiores a los demás mediocentros del Chelsea. ¿Apuesta arriesgada? Por supuesto, pero es el camino. Aún así parece ser que la captacion de los nuevos automatismos está siendo satisfactoria ya que, según AVB, “the most important thing is we believe in the way we are playing.”
- Despliegue ofensivo
Siendo el choque “a crazy match”, el poderío ofensivo y las oportunidades de cara a gol del Chelsea estuvieron presente. “Normally when you create 21 opportunities at Old Trafford you should come away with at least a point and a couple were very good opportunities so I think 3-0 at half-time is crazy.” Incidir sobre la participación de Fernando Torres es un punto desgastado. Tanto él como el resto de los jugadores de perfil ofensivo del Chelsea dependen, en gran medida, de cómo se encuentre Mata en el terreno de juego. Con espacios, con un ritmo acorde a su condición física y/o en la zona de ¾ es la clave para que el juego tenga cierto sentido. Sólo él es capaz de dar pausa al juego, imprimirle ritmo si es necesario y ofrecer pases en profundidad para que, en definitiva, sus compañeros vean elevado su nivel y rendimiento.
- Actitud y progresión
A pesar de ver cómo durante un primer tiempo en el cual no se es inferior, en términos generales, al rival el marcador dicta una amplia ventaja, la actitud y el compromiso se mantuvieron. “I am very happy with how our team reacted to such a negative half-time result.” Manteniendo eso como un ejemplo para las situaciones adversas que existirán la habilidad de retornar contextos desfavorables será exponencialmente superior. Quizás la destreza psicológica de Villas-Boas sea, de nuevo, diferencial. “This Premier League is unpredictable.”
Artículo publicado en Fútbol Británico: http://futbolbritanico.com/2011/09/not-everything-has-been-negative/
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