viernes, 15 de junio de 2012

Diario de un sueño: día 7

¿Consideramos que la Italia Campeona del Mundo también pivotaba sobre la presencia de Pirlo? Haría falta revisionar los partidos para hacer una afirmación más categórica, pero la sensación que existe en el recuerdo es afirmativa. Pirlo está demostrando que es un jugador sobre el cual se puede formar no ya un equipo sino un ideal, unas pautas. Los primeros 45 minutos de partido de ayer sirven para definir por qué, con una edad ya elevada, sigue siendo un jugador diferencial. El pensamiento que uno posee al presenciar tal exhibición es meridiano. Evidente y palpable. "Estamos ante ese momento en el cual es necesario disfrutar de cada partido de Pirlo. Al máximo." No cabe ninguna duda. 

Instantes antes del comienzo del partido, sabiendo que Prandelli repetía el mismo "XI" que ante España, la conversación que el que edita tuvo con Tancredi Palmeri versaba sobre si la figura de De Rossi podría sufrir ante la pareja Jelavic - Mandzukic. Por aquello de la defensa de cinco hombres en fase defensiva y la movilidad de los dos croatas. Y, tras la finalización del partido, el error que habilitó el gol de Croacia se produjo tras fallo en la marca individual de Chiellini tras centro lateral. De Rossi, again, volvió a demostrar que su aporte como líbero es extremadamente positiva para Italia. La duda es saber si Prandelli mantendrá este esquema ante una Selección (R. Irlanda) que no presume de provocar excesivo peligro en el área rival.

Respecto a L. Modric poco hay que destacar. Es el evento común en sus actuaciones. La reflexión personal de ayer una hora antes del partido era la siguiente: "Cuando una persona establece expectativas elevadas en la previa de un partido de Modric siempre termina por elogiar nimiedades. Y, quizás, en ese detalle perceptivo residan explicaciones al por qué de que la crítica hacia Modric tenga tantos defensores. Tantos adeptos." Ni en el mediocentro ni el la mediapunta. Lo contraproducente es que Croacia sí confiaba (¿confía?) en él como figura diferencial.

Pirlo, instantes antes de anotar gol.
"La duda es saber si Prandelli mantendrá este esquema ante una Selección (R. Irlanda) que no presume de provocar excesivo peligro en el área rival." Quedó demostrado en su segundo partido de competición. Bien es cierto que éste era frente a España, Selección sobre la que cuando se juega pocos análisis se pueden obtener de manera objetiva. Pero R. Irlanda es, probablemente, el combinado de menor nivel de las 16 participantes. Detalles como no presionar a Xavi, dejar que Iniesta y Silva recepcionases libres de marca, no ser contundentes en los despejes en área propia... establecen la falta de capacidad competitiva ante rivales de elevada exigencia.

Y es que no es destacar el partido de Silva e Iniesta. Es resaltar su momento de forma, su inteligencia futbolística. Y la estimulación que provocan. Absolutamente asombroso todo lo que aportan en un terreno de juego. Se encuentran. Se buscan. A pesar de la falta de Fàbregas, tercer integrante de esta conjunción ante Italia. Debido ello a la presencia de F. Torres. El discutido delantero español obtuvo, desde instantes iniciales, un aporte de confianza y tranquilidad para con su juego. El hecho de haber anotado el gol más rápido de España en competiciones internacionales provocó que su actuación sirva para aumentar el debate, curiosamente. Porque Fàbregas dispuso de minutos finales y, a su vez, anotó otro gol. Destapado como falso 9 junto a L. Messi en su primera temporada en el FC Barcelona, el "10" de España (será el eterno "4") está rindiendo a un nivel altísimo. 

Quizás sea, junto a la optimización de la banda derecha, los pocos asuntos a debatir en torno a una Selección que mantiene su aptitud ganadora. Bajo la comparecencia de Löw en Gdansk España endosó la mayor goleada, hasta el momento, del torneo. Todo influyo: el bajo nivel del rival y la tonificación propia. Los equipos punteros comienzan a coger un ritmo enfocado. Lineal y estimulante.


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